Como parte de un evento especializado, organizado por los socios de Lleida, el pasado 7 de octubre, tubo lugar una mesa redonda para tratar el tema del desarrollo de la competencia digital en la formación de futuros maestros.
Inicios de la tecnología digital en la FEPTS de Lleida:
El profesor Enric Brescó nos explicó como la tecnología digital poco a poco se ha ido haciendo más presente en la formación del profesorado. Todo se inició en el año 1992, introduciendo la asignatura de Nuevas Tecnologías en los estudios de magisterio, pero no fue hasta el año 2018 cuando dicha asignatura empieza a adquirir entidad bajo el nombre de Tecnologías digitales, integrándose en los Grados de Educación Primaria y de Educación Infantil. Actualmente esta asignatura se ofrece de manera exclusiva en
Educación Infantil como valor añadido y para dar respuesta a las necesidades crecientes de la sociedad. En cambio, el Grado de Educación Primaria cuenta con una mención STEM. El objetivo general de la Facultad es que el alumnado evidencie su competencia digital docente, tanto en su vertiente instrumental como en la metodológica, haciendo una firme apuesta por la tecnología en la formación inicial del profesorado.
Poniendo el foco entre la relación de ser competentes digitalmente, la formación y la educación, se ha evidenciado que se trata de un tema global, en el que muchos países están viendo la necesidad de establecer marcos de referencia para velar por la digitalización, estableciendo unos criterios y pautas comunes para tratar de evitar la mercantilización de la educación por parte de grandes empresas tecnológicas. En Cataluña, el Departamento de Educación afronta el tratamiento digital estableciendo una serie de documentos como marco de referencia. Así desde el 2013 vemos creados
documentos marco en referencia a la competencia digital del alumnado de primaria, pero no es hasta el 2018 cuando sale el documento de Competencia Digital Docente que afecta a todos los profesores del territorio y demanda que estos sean competentes a nivel instrumental y metodológico. Finalmente, en el año 2021 sale el documento marco del Uso de las tecnologías digitales a educación infantil. Todos estos documentos están bajo el marco de “El Plan de educación digital de Cataluña. Un plan
para aprender en un mundo digital 2020-23”. Este plan se centra en tres grandes ejes: alumnos, profesorado y centros educativos. A nivel del alumnado propone alumnos digitalmente competentes y protagonistas de su aprendizaje para alcanzar el éxito. En lo que respecta al profesorado nos habla de profesores empoderados y capacitados digitalmente para hacer frente a numerosos retos metodológicos y dar respuesta a las necesidades de los alumnos; profesores que saben cuando hace falta introducir la
tecnología, ya que esta es un recurso, no una finalidad. Finalmente, a nivel de centros educativos, propone centros con un liderazgo y recursos flexibles para dar respuesta a las necesidades educativas que conlleva vivir i aprender en un mundo cambiante y digital.


Singularización de los espacios en la FEPTS de Lleida:
Como nos cuenta el profesor David Aguilar, la digitalización ha invitado a reformular o reinventar los espacios de la Facultad para dar respuesta a una necesidad para avanzar en modelos de aprendizaje innovadores y diferenciados que ayuden a formar profesionales más competentes y adaptados a una sociedad moderna, democrática y más tecnológica. Esta innovación busca implicar a los estudiantes y profesores en metodologías dirigidas a competencias transversales fundamentadas en el desarrollo de la creatividad, la innovación, la resolución de conflictos, el pensamiento crítico, la comunicación, la colaboración y la digitalización de la información. Todas estas competencias han hecho necesario la creación de nuevos espacios que posibiliten nuevas pedagogías centradas en las necesidades actuales, creando espacios abiertos, digitales, flexibles, colaborativos y creativos que están a disposición de profesores y alumnos.


Competencia digital y pensamiento crítico:
La profesora Pepa Valls ha puesto sobre la mesa tres aspectos importantes sobre los que reflexionar: La educación no es una mercancía, ¿Adaptarse a un mundo que cambia o ser agente de cambio? y Tu y yo somos un equipo, un equipo brutal. Para la Facultad, la competencia digital de los alumnos también está en relación con la necesidad de poner en duda dicha competencia digital. Es importante que los alumnos no tengan que aceptar de manera acrítica las propuestas que les hacen las administraciones educativas o incluso las empresas tecnológicas, que cada vez parece
que tengan más influencia en el mundo educativo. Últimamente, las grandes empresas tecnológicas están desembarcando de forma masiva en el mundo de la educación, contribuyendo a definir políticas educativas relacionadas con la introducción de tecnología en los centros educativos y la implantación de la educación telemática. Por lo tanto, es necesario preguntarse cuáles son sus intereses reales, y tener en cuenta
que el contexto educativo es un contexto especialmente sensible y que en él de alguna forma es donde se moldean las culturas del futuro, con lo que no podemos contribuir a generar un pensamiento único aceptando todo aquello que viene dirigido por unas pocas empresas. Por lo tanto, es importante que los alumnos no solo desarrollen la competencia digital a nivel instrumental y metodológico, sino también a nivel crítico.
Del mismo modo parece que todas las innovaciones educativas están dirigidas a que nos tenemos que adaptar al mundo en el que nos ha tocado vivir, y parece que la tecnología tiene un papel fundamental en ello. Un factor para tener en cuenta al respecto de lo citado anteriormente, es que la educación híbrida, objetivamente aísla y por lo tanto tiende a una educación más individualista. Si entendemos que educar es aprender a vivir juntos a partir de problemas comunes y con la condición de que cada
uno los pueda pensar por sí mismo… cómo aprenderemos a vivir juntos sin estar juntos, a resolver conflictos sin que haya conflictos, a generar consensos…
Por lo tanto, la tecnología tiene que estar sujeta a una finalidad educativa y por ello debemos tener muy clara la idea de alumno que queremos formar para saber cuál es el tipo de sociedad que aspiramos a construir.

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